
Nota de Opinión – Los Organismos de control..¿controlan?
Los organismos de control…¿controlan?
Cortes de luz, calor extremo, falta de agua, infinitas pérdidas materiales, llevan a un hartazgo generalizado. La historia se repite año a año. ¿Por qué los usuarios no reciben servicios de calidad y sufren cortes de suministro?
En el momento de calor más agobiante, los cortes de energía y agua son cotidianos. La situación que viven miles de argentinos y bonaerenses es desesperante, hay organismos de control pero los servicios públicos en lugar de brindar un servicio de calidad, presentan problemas todo el tiempo. En la Defensoría ciudadana recibimos cientos de quejas de vecinos que están hartos de no tener presión de agua, no tener agua o que el agua salga marrón. Los vecinos pagan por un servicio que no se cumple. Nunca les descuentan los días que no recibieron el suministro y si no pagan a término les cobran interés. La respuesta que podemos darles, más allá de la gestión particular, es que la situación del agua requiere importantes obras que mejoren la calidad del servicio para el presente y el futuro y que esas decisiones son políticas, que es el Estado el que define en qué obras invierte y en cuáles no.
Los servicios públicos están hace años en el tope del ranking de los reclamos sociales, el Estado en cumplimiento con la Constitución, ha creado organismos para controlar los servicios públicos, cada uno con partidas presupuestarias, recursos humanos y objetivos claros: control y fiscalización de obras, inversiones y calidad de los servicios. En la Provincia existen el Ocaba, Organismo de Control del Agua de la Provincia de Buenos Aires, el Energas, ente regulador del gas, el OCEBA: Organismo de control de Energía Eléctrica y decenas de organismos y asociaciones en defensa de los consumidores y usuarios. ¿Por qué motivo entonces, la situación de los servicios de mala calidad siguen repitiéndose.
En estos días se realizó una audiencia pública (la N°102) convocada por el Enargas para definir el aumento o readecuación de la tarifa del gas. Fue una jornada extensa en la cual las empresas distribuidoras del servicio expusieron su situación y su propuesta de aumento, se expresaron también defensores del pueblo, defensores de consumidores, vecinos, etc. Cada uno plantea desde su lugar, las necesidades y argumentos para solicitar tal o cual porcentaje de aumento. Supuestamente, luego de una audiencia pública se llega a un acuerdo, se discuten aumentos de tarifas y obras de inversión para mejorar los servicios y se publican los nuevos porcentajes que pagará la comunidad. Pero la experiencia indica que existe un acuerdo previo entre las empresas y el Estado y que las Audiencias son meras “puestas en escena”. No son vinculantes, más allá de lo que se discute allí, las resoluciones, las decisiones las toma el Gobierno de turno.
Cuando vemos las manifestaciones ciudadanas, la indignación de la gente que sale a la calle y reclama el re establecimiento de los servicios, el reclamo es contra las empresas y es lógico. Aunque deberían reclamar también a los organismos de control que son los que deberían garantizar que los servicios sean de calidad. Deberían cumplir con esa función pero no lo hacen. Como sociedad, debemos exigir que los organismos de control, controlen; que las empresas que prestan servicios públicos, inviertan y provean servicios de calidad; que los usuarios paguen por lo que consumen, porque tampoco es una situación sostenible en el tiempo la de los subsidios a los servicios públicos. Paguemos a las empresas los montos lógicos que correspondan y hagamos efectivos los organismos de control. Planificación a largo plazo e inversión. La situación social y de infraestructura no permite más improvisación ni parches que deterioran día a día la calidad de vida de los vecinos. La sensación es que la política mira para un lado y los vecinos para otro, que están desconectados y de esa forma difícilmente puedan dar respuesta a las necesidades de la gente. Necesitamos que la política, las empresas y el Estado estén comprometidos y enfocados y que se gestionen las obras necesarias para que los ciudadanos reciban por fin, servicios de calidad; ah y que los que tienen que controlar, controlen.